lunes, 13 de junio de 2011

CUERVOS ENFRENTE, CUERVOS ADENTRO

La traición es una patada potente en el culo. Un puntinazo. Una bala que penetra por algún lado para impactar en el corazón. Generalmente tiene el poder de arruinar el lazo previo. De producir una profunda herida eterna en forma de pregunta abierta. Un desencantamiento pesado.

Inevitable pero también necesariamente se buscan las causas que pudieron haber producido el fenómeno. Surge la duda en función de las alertas que pudieron haberse presentado. Se llega al comienzo del todo, al origen de la cosa, al carozo del asunto. Sin embargo, muchas veces no alcanza para que todo cierre (como en algunas películas fáciles). El paso del tiempo, el contexto, la dirección del viento, una torta de guita, el miedo al pozo negro y otros etcéteras pueden operar cómo móviles de una traición. Modifican el escenario y pueden llevar a “cantar”, a callar, a mentir, a escapar, a mirar para otro lado, a afanar, a mandar a matar. Nuestra historia está cargada de esas historias.

Pero se arribe o no a una reconfiguración que permita dar cuenta de las causas de lo ocurrido, a veces, lo que queda son hechos concretos. Esos hechos que exponen y materializan la traición. Todos los “yo sabía”, “yo te avisé”, “era de esperar”, y así por el estilo, son tardíos. El daño está hecho. Y más cuando lo que se afecta tiene un carácter colectivo. Y si implica una acción fraudulenta, corrupta o delictiva, entra a un terreno legal y jurídico. Y si, encima, el asunto es de interés público, la cosa se pone más compleja.

Resulta “natural” que circunstancias de ese tipo determinen la (re) activación de todo el dispositivo mediático en función de intereses reaccionarios. No puede sorprender. Hay una caterva ultra recalcitrante que arrancó de cuajo el tablero de los códigos (pero eso sucedió hace mucho tiempo).

Sin embargo, la batalla cultural continúa. Y por eso es importante afinar las prácticas discursivas, tanto como la perspectiva crítica. No sirve de nada sistematizar las culpas en el relato de los “obvios”. Es importante marcar como se aventuran en la destrucción, pero también hay que tener la grandeza de reconocer los propios desaciertos. Eso quizá nos haga mejores cada día, y seguramente nos hará más. Que, en el fondo, es lo que buscamos que ocurra en el camino.

A veces no profundizar una dialéctica interna puede desembocar en “hacerles el juego”. Estar activos con el corazón, la cabeza y el cuerpo, corresponde a un movimiento colectivo, firme pero heterogéneo, para no caer en la cursilería ni en la peligrosidad de lo “ya sabido”. Defender nuestras banderas implica seguirnos discutiendo para poder avanzar. Seguir aprendiendo de la historia. De cada historia.

En algún sentido, nos causa gracia la cantidad de “ahora dicen”, “habría” y tantos zócalos infames. Pero no hay que perder de vista que una vereda tan grande permite en sus filas también la estadía y el pasaje de personajes nefastos. Por eso es importante intensificar la discusión y la reflexión. A la hora de asignar roles importantes, de construir espacios de poder, de manifestarse públicamente, de tomar decisiones en tiempo y lugar. Porque siempre hay que seguir caminando, por más que la utopía parezca acercarse un poco, se aleje bruscamente, vuelva a acercarse, se mueva. Y todo lo demás también.

13 comentarios:

  1. Excelente, Tango. No puedo dejar de pensar en Schoklender y el daño irreparable a lo colectivo, a las Madres, a unas de las pocas que no cortaron el rostro y se brindaron. Como hacen ellas. Pero no solo en ese ámbito. Coincido con vos en que hay que seguir caminando y este camino tendrá tropiezos, aciertos, retrocesos y avances. Pero es la única manera. Quedarse en el discurso de los "obvios" es fácil. Un atajo a la derrota, me animaría a decir. Las anteojeras de todos los días.

    Abrazo enorme desde el sur.

    ResponderEliminar
  2. Realmente, excelente el posteo, y necesario. Es necesario como decís entender las responsabilidades colectivas, para aprender de ellas. Intensificar la reflexión, es totalmente necesario. Comprender, entender, porque sino todo se pierde como en una galaxia de panes rayados, tal cual.
    Abrazo.

    (Horacio: SS traicionó a HB como en su momento lo hizo Astiz con otras madres. No lo supimos, no lo quisimos, ver o imaginar. Sacudirse el letargo, se vuelve imperioso. Saludos.)

    ResponderEliminar
  3. Muy buena entrada, Tango. Por momentos me pregunto cómo puede ser que nadie supiera; que nadie dudara cuando el tipo se compraba aviones, por ejemplo, cosa que no está al alcance de cualquiera... Pero la miro a Hebe, tan fuerte, con esa imponencia y esa lucha tatuada en el rostro y no puedo creer que ella lo supiera. Termino creyendo que es cierto que el amor ciega a la gente, como en este caso. Es difícil desconfiar de alguien a quien se quiere tanto, y ella lo adoraba.
    Es repugante cómo los medios están ensuciando a las madres, es tristísimo. No pueden señalarlas por nada, jamás.
    Beso grande!!!

    ResponderEliminar
  4. Excelente Tango... Siempre digo que a los ex convictos se les debe una oportunidad... que nadie llega donde llegó por azar...
    ¿Nuestras cárceles recuperan? mirando a SS pensaba que sí... pero si hasta la sigla es premonitoria!!!
    No quisiera estar en el pellejo de Hebe, tiene formas que no me gustan... pero son eso FORMAS!!
    Cómo la golpea la vida y ella siempre para adelante... Qué sensación de horfandad debe tener!!!

    ResponderEliminar
  5. Una sola cosa;
    si por no bancar a un amigo, bancás a otro... era Zito Lema el que hablaba (y yo leía Crisis cuando tenía 15 años)... de algo te tenés que hacer cargo.
    Eh; con qué me van a tirar? Yo las banco a las Madres! si fueron las primeras que pusieron el pecho. Y había que ponerlo, no era joda!
    Mejor me voy al silencio. Muy buena, Tango.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  6. Horacio: Gracias, de verdad. Y hay que estar alerta para intentar no caer de boca al piso en el futuro. Y para salir adelante ante los tropiezos y errores que puedan presentarse. Las anteojeras nunca ayudarán demasiado. Abrazo grande.

    Almita: Totalmente de acuerdo. Es vital “sacudirse el letargo”. Y sí. Cuantas traiciones a lo largo de la historia. Lobos disfrazados de corderitos. Cagadores imperdonables. Cagones vendidos, angurrientos. Miserables egoístas. Un beso y muchas gracias.

    ResponderEliminar
  7. Sol: Me pasa lo mismo. Resulta que nadie sabía, pero también hay muchos que “ahora dicen” que no se sorprendieron, que el hijo de puta este siempre fue así y asá. Pero tarde. Estamos hablando de las Madres. Tenemos bien claro lo que significa el valor de su lucha para nosotros. Como representan la resistencia inclaudicable, como nos enorgullecen en su andar. Sin embargo, el accionar discursivo de los medios corporativos y de otros “obvios” me repugna y me indigna tanto como a vos, pero no me sorprende demasiado. Estaban esperando la mínima grieta en los Organismos de Derechos Humanos “afines al gobierno” para golpear justo ahí. Besos.

    Hilda: ¿Viste vos? Uno no deja de preguntarse hasta dónde puede llegar la ambición. “Cuanto más alto trepa el mono más se le ve el culo”. Que traición tan desconsiderada y alevosa. Imperdonable. Y qué decir de Hebe. Portadora de una hidalguía gigante. Es admirable su fuerza para sobreponerse a tantos golpes bajos. Y es tristísimo verla entreverada en este quilombo. Es injusto, totalmente indeseable. Gracias. Un abrazo grande.

    ResponderEliminar
  8. Hola Tango, no se si Hebe realmente sabía lo que
    estaba pasando, pero no nos olvidemos que la
    palabra traición viene sin aviso.
    Estemos atentos como decís, se esconden en todos
    lados y hay que ponerlos al decubierto antes que
    logren sus sucios propósitos.

    Me gustaria tener tu logo nuevamente en seguidores
    de mi blog, ya que se borró, un fuerte abrazo.

    ResponderEliminar
  9. Daniel: No está mal lo que planteás, creo haber entendido por dónde viene la mano en la cita que hacés. Es importante destacar que la lucha que llevaron y llevan adelante las Madres no es lo que está en tela de juicio. Después, claro, lo que respecta a responsabilidades legales está en veremos. No deja de ser triste, pero es así. Abrazo.

    Roberto: Cuesta muchísimo desconfiar de ella. Y si, la traición tiene ese poder de manifestarse con crueldad. Pero en algunos ámbitos de representación colectiva hay que ser muy cuidadosos. Hay que estar en constante alerta, porque la traición espera a la vuelta de la esquina.
    Ahora mismo me fijo qué pasó con lo que mencionás. Un abrazo.

    ResponderEliminar
  10. El "cambio de eje" que se produjo en 2001 tras cuarto de siglo neoliberal-genocida fue tomando una centralidad diferente desde 2003.
    DDHH, Redistribución, Suramérica, Desendeudamiento, Productividad, Jubilaciones, AUH, Mercado Interno, son el nuevo eje.
    El escenario se planta en ese eje y los que pueden caer (como sumarse) son actores más o menos conocidos.
    En esa enormidad de universo, Schoklender es nadie. Porque los "beneficiarios" directos del nuevo eje, alrededor del cual todo su pequeño mundo gira, no estarán dispuestos a entregarlo porque su pequeño mundo se esfumaría nuevamente.
    Un asalariado o un jubilado que han padecido la precariedad o la miseria, no querrán resignar lo mejor que pueda estar ahora.

    Me alegro conocer este blog. Lo sumo a mi lista.

    Salud!

    ResponderEliminar
  11. K-Explícito: Ese "cambio de eje", basado en las políticas públicas que mencionás, permitió también que se puedan discutir y votar, por ejemplo, Ley de Medios y Matrimonio Igualitario. En ese sentido, parece importantísimo sostener ese "eje" de transformación nacional, enmarcado en un crecimiento regional suramericano. Por un lado, teniendo en cuenta el alevoso contraste con las principales fuerzas opositoras, inevitablemete serviles a los intereses de las corporaciones. Pero también para profundizar los cambios que hasta aquí no se materializaron. Que existen y son deudas pendientes. Particularmente no me gusta subestimar ni presagiar sobre futuras conductas de los sectores populares mayoritarios, pero es muy probable que se acerque bastante a lo que planteás. El caso SS es hoy el eje de campaña de todo el arco opositor. Sería saludable que pueda construirse una fuerza opositora en línea con lo que posteaste en tu blog. Un abrazo.

    ResponderEliminar
  12. Muchas gracias, Melodi, pasaré por allí.

    ResponderEliminar
  13. Muy buena amigo, impecable!!! y... sin lugar a dudas hay que prestar atención a los de afuera , pero más aún a los de adentro,sobre todo en los tiempos que se vienen. Nos vemos tanguito!!

    ResponderEliminar

Hicieron camino al andar