jueves, 1 de agosto de 2013

Primeramente quisiera saludar

   Esta película ya la dieron. Alguien levanta el dedo, la voz, el pelo, las tetas. El micro viene bastante lleno. Los que se bajan, los que se suben, los que empujan, los que se hacen los dormidos. Los dormidos, los perdidos. El micro frena de golpe, Alguien baja rápido corriendo. Alguien ordena papeles, tontea . Vos saltás, te atás. Estás ahí, del otro lado de la pantalla. La de reir y llorar.

   Los gritos son los de siempre. Las consignas son como unos carteles a los que llaman pasacalles. Las conciencias son como almas que firman un petitorio. Las escaleras son esos ladrillos que ves ahí. Todos esos pisos que se fueron construyendo. De a uno, porque los cimientos no son solamente materiales. Hay un mundo allí fuera que les da vida y forma. Años de gente. Mucha gente. Estampitas en la computadora y cosas posta. La de abrir ventanas posibles.

   Tener tanto culo como para que pase algo bueno. Sacar las cuentas (entre los ejemplos de pescado podrido y la bosta del toro campeón) parece gracioso en cualquier continente. Son formas de discutir. Modales académicos, tecnicismos. Mandar a la gringada a la concha de su madre. Una sutileza económica. La lupa en los impuestos y los opios de los subestimados pero enormes pueblos. Los que caminan, aunque no puedas verlo.


   Parece temprano de vuelta. Las palabras falsas están indiferentes. Esta es una película de 24 fotos repetidas por segundo. Las caras de culo que se avecinan una vez más. Los días lindos que llegarán. Mañana, alguna vez.


1 comentario:

  1. Nadie tiene esa fija, y los boletos que seguimos jugando o las fichas que se ponen porque en el fondo (corriéndose pa'l mismo que hay lugar...) algo sospechamos... A despertar que se hace temprano, a no dormir que Limón asoma.
    Rato hace que no pasábamos por acá y (días más, días menos) el timming correcto para que también en el Corredor se esté pedaleando otra vez y se note que todo sigue en pie.

    A por más, abrazo.

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Hicieron camino al andar